EL MEJOR FESTIVAL DE MI VIDA
“Suena
un pitido agudo en mis oídos que va en aumento. Siento calor por todo el
cuerpo.
Me
duele la cabeza como si alguien me estuviera dando con un mazo. Estoy
desorientado.
Esta
es sin duda la peor resaca de mi vida”.
Fundido a negro.
Jorge, Javier, Jose y Juan están esperando el
tren que les va a llevar hasta Alcalá de Henares para asistir al XI Glam Rock
Festival. Están entusiasmados porque acaban de cumplir los dieciocho todos y al
fin sus padres les han dejado ir. Mientras esperan bromean entre ellos.
-
Todavía no me lo puedo creer, chavales – dice
Jorge
-
Pues créetelo maricona, vamos rumbo al mejor
festival de rock del año – dice Jose
Sacan una botella de champán del caro y
empiezan a beber uno a uno, a morro, pasándose la botella.
-
¡Buah, chaval! Sabe a gloria esto – dice Juan
-
Estoy deseando ver a los Glam Two Three, Four –
dice Javier
-
Pues a mi me han dicho que unos que se llaman
Los Fiambres no están nada mal – comenta Jose
-
¡Otra ronda, chavalada! – exclama Javier
Fundido a negro.
María, Miriam, Marta y
Mónica están dentro del tren y también acaban de cumplir los dieciocho años,
excepto, Mónica que tiene diecisiete aún. También se dirigen al XI Glam Rock
Festival de Alcalá de Henares. Ven subir a Jorge, Javier, Jose y Juan en la
estación de Atocha.
-
¿Habéis visto que
pintas llevan esos? – dice Miriam dirigiéndose a nuestros chicos
-
Pues a mi me mola –
dice Mónica
-
¡Pero si van más
pintados que nosotras, tía! – exclama Marta
-
Maricones, seguro que
son todos maricones – dice María
-
Pero si vamos a un
festival de glam rock, no tenéis ni puta idea – dice Mónica con un tono de
enfado.
-
Vale, tía, no te
mosquees, encima que vamos por ti. A mi donde esté Pablo Alborán… - dice María
medio suspirando
El resto suspira a la
vez que María.
Fundido a negro.
Vemos a un grupo de
cinco tipos que aparentan unos treinta y tantos con pintas de macarras, son Los
Fiambres que también van en el tren porque son una banda que acaba de empezar y
les ha tocado subir con todos los bártulos: guitarras, un bajo y un juego de
platos de batería, todo en sus respectivas fundas.
-
Estoy hasta los
cojones de tener que cargar con todo el equipo cada vez que nos sale un bolo
fuera – dice indignado Néstor, cantante y líder de la banda.
-
No me jodas, Nes, que
esto no es un bolo cualquiera, que esto va a ser nuestro pasaporte al
estrellato – dice Nacho, bajista de la banda
-
Sí tron, pero a ver si
pillamos un manager para no tener que ir siempre así, que sólo nos falta la
cabra – responde Nino, guitarra de la banda.
-
Pues yo estoy de
acuerdo en lo del manager, colegas – dice Nando, el otro guitarra de la banda.
-
Eso, eso, joder… Que
yo estoy hasta el culo de llevar las herramientas por la calle, que parezco
Manolo el del bombo – dice Naím, obviamente el batería de la banda.
Fundido a negro.
Nuestros chicos y
chicas acaban de llegar al recinto. Mientras tanto vemos a Los Fiambres con sus
bártulos a cuestas hacia la zona de camerinos.
El recinto es grande,
al aire libre en una explanada gigante, donde hay tres escenarios, puestos de
merchandising, varios puestos para comer y beber y la zona de acampada.
El primer concierto es
a las 16:30 horas, tocan Los Fiambres, que ya están probando sonido.
Todavía queda una hora
para que empiece oficialmente el XI Glam Rock Festival. Cosa que aprovechan
nuestros chicos y chicas para comer y beber un poco para tener fuerzas y darlo
todo en los conciertos.
-
Paso, paso, que mancho
– advierte Jose mientras se abre paso con unos minis de cerveza.
-
Joder, qué de gente y
eso que todavía no han empezado los conciertos – se queja Javier que lleva unos
bocatas.
Jose tropieza con
Mónica y le mancha la camiseta de cerveza.
-
Mierda – exclama
Mónica
-
A ver si miras bien
por donde vas nenaza – le increpa María que va con ella
-
Eso tiene fácil
solución, que se quite la camiseta – dice Jose sarcástico
-
A ti lo que te pasa es
que eres un cerdo – vuelve a intervenir María
Javier intenta
tranquilizar los ánimos cuando se da cuenta de que la camiseta de Mónica es del
mismo grupo que la que lleva él puesto.
-
Tranqui chicas, por
cierto, ¡te gustan los Glam Two Three Four como a mi! Pues he visto unas
camisetas muy chulas en un puestecillo que hay cerca de aquí, si quieres te
podemos compensar comprándote una – dice Javier entusiasmado con la idea.
-
No, gracias, no pasa
nada. Es que me gusta mucho esta camiseta – dice agradecida Mónica.
-
En serio, he visto una
de los Glam Two Three Four que seguro que te mola… Vamos que yo me la voy a
pillar – insiste Javier.
-
Bueno… Por mirarla no
pierdo nada. Pero ya te digo yo que esta camiseta es insustituible – dice
Mónica sin demasiado entusiasmo.
-
Guay, por cierto me
llamo Javier ¿y tú?
-
Mónica.
Fundido a negro.
Los Fiambres ya están
preparados en el escenario más pequeño para empezar con su show. Van ataviados
con unas capas negras y están dando la espalda a la poca audiencia que hay. Se
hace un silencio que parece eterno. El público empieza a abuchearlos cuando de
repente se escucha: ¡un, dos, tres GLAM! Acto seguido la banda se da la vuelta
y descubrimos que llevan caretas de los Kiss, cada uno de los de la formación
original y comienza una demoledora canción de apenas dos minutos y medio que
empalman con otra que sigue a las mismas revoluciones que la primera. Cuando
llega el final, se quitan las capas y las caretas y Nes grita:
-
Buenas noches putitas,
somos Los Fiambres, ¿quién tiene hambre de rock and roll? ¡No os oigo cabrones!
¿Quién tiene ganas de rock and roll?
Entre el público están
nuestros chicos y nuestras chicas gritando a la vez. Vemos que Javier y Mónica
lucen camiseta nueva.
Fundido a negro.
Ya en el camerino.
-
Buah, chavales vaya
pedazo de concierto que nos hemos marcao, que no? – dice Nes completamente
empapado en sudor
-
Bueno – dice Nino – no
te flipes tanto Nes que había cuatro gatos de público
-
Eso, eso – increpa
Naím
-
Éste como siempre en
los mundos de Yupi – apuntilla Nacho
-
¿Habéis visto como me
comía con los ojos la rubia con pinta de pija? – dice Nando refiriéndose a una
de nuestras chicas, Miriam.
De repente alguien
llama a la puerta del camerino, es Miriam.
Fundido a negro.
Se acerca el final de
fiesta esperado por todos: la actuación de Glam Two, Three, Four en el que se
rumorea va a ser el último concierto de la banda. Juan se acerca junto con
Marta que lleva una camiseta de Los Fiambres autografiada por toda la banda,
menos uno, a la barra de uno de los puestos a pillar bebida antes de la traca
final. Allí se encuentran con Nes, que está haciendo lo propio.
Nes va hacia Marta.
-
Bonita camiseta. Que
quieres tomar, invito yo.
-
(Nerviosa) Es que
vengo con un amigo y…
-
(Le corta Nes) ¿Qué
pasa que él no sabe pedir solito o qué?
-
(Cada vez más
nerviosa) No si es que…
-
(Vuelve a cortarle
Nes) Pues no se hable más, ¿que quieres morenaza?
Juan que está
escuchando la conversación perfectamente interrumpe.
-
Para empezar, chaval,
la chica ha venido conmigo. Segundo, puedo pedir yo solito, así que gracias
pero no hace falta que la invites pues para eso estoy yo, Y tercero, vuestra
banda es una puta mierda.
Fundido a negro.
El apoteósico
concierto de los Glam, Two, Three Four ha dejado exhaustos a nuestros chicos y
chicas que han estado viendo el concierto juntos. Y un poco más apartados los
chicos de Los Fiambres excepto Nando. Durante uno de los pogos Nes y Juan se
han picado otra vez y han tenido que separarlos entre sus amigos. Ambos tienen
un ojo hinchado y cortes en el labio.
Fundido a negro.
Son las seis de la
madrugada, el festival terminó hace tiempo pero parece que los chicos de Los
Fiambres decidieron prolongarlo por los garitos de la zona. En uno de ellos da
la casualidad que se encuentran con un tipo alto con chupa de cuero y gafas de
rock star. Oímos lo que están hablado.
-
Como os lo cuento, me
ha gustado mucho vuestro bolo y en mi discográfica necesitamos sangre fresca, ¿que
os parecería sacar un disco en unos seis meses? – les propone el tipo
Los Fiambres alucinan
ya que el tipo alto es Johnny “el Seco” cantante y líder de los Glam, Two,
Three, Four y mandamás de una de las mejores discográficas del país.
Fundido a negro.
A las siete de la
madrugada nuestros chicos y chicas, que también han prolongado la fiesta por
los garitos de Alcalá de Henares ya están bastante borrachos y deciden
encaminarse hacia el tren.
A su vez, Los Fiambres
también se dirigen hacia el tren. Van “cargados de alcohol” y llevan como
pueden sus bártulos, casi arrastrándolos por el suelo pero con unas sonrisas de
oreja a oreja.
Fundido a negro.
Nuestros chicos y
chicas, ya en el tren, van haciendo resumen de lo bien que se lo han pasado.
-
Y entonces empieza a
vacilar al del puesto. Va y le dice: “Oye tú, ¿nos haces un dos por uno en esa
camiseta de los Glam Two Three Four? – está comentando Mónica – y va el del
puesto y le dice ”¿y por qué no se las compras a tu puta madre en el Carrefour
que allí sí que hacen tres por dos para subnormales como tú?
Se empiezan a
descojonar todos en grandes carcajadas.
-
Total – termina
diciendo Mónica – que éste (señalando a Javier) se quedó parado, to rojo y me
dice: “Vámonos a otro puesto que tengan más educación”
Javier se vuelve a
poner rojo y asiente con la cabeza.
-
Uy, eso no es nada –
dice Miriam – la cabrona de Marta se apostó conmigo un mini de ron con piña colada
a que no era capaz de ir hasta el camerino de Los Fiambres y pedirles una
camiseta firmada por todos.
-
¿Y qué hiciste para
conseguirla so guarra? – le pica María.
-
Nada, todos se
portaron muy bien y empezaron a firmar la camiseta hasta que uno se puso chulo.
-
Nooo – dice Juan –
seguro que fue el cantante.
-
Te equivocas fue uno
de los guitarristas de la banda, el de
la cinta en el pelo – les aclara Miriam.
-
Nando – dice Marta.
-
Pues ese… Y va y me
dice que si quiere que le toque algo, que si el mástil de la guitarra no se
qué… ¡Total! Que empezó a acercarse con muy malas intenciones y yo cogí lo
primero que había allí por banda, que luego resultaron ser unos platillos y le
endosé las doce campanadas de Nochevieja que va a estar escuchándolas varios
días.
Otra vez inundan el
vagón de carcajadas.
-
Esperad, esperad, ¿no
os habéis dado cuenta de la cara tan bonita que lleva Juan? – se cachondea
Jorge – ¡cuenta campeón!
Juan empieza a relatar
los hechos con pelos y señales.
-
Y cuando le dije que
su banda era una puta mierda el muy imbécil viene a por mi con cara de
mala hostia y ya me conocéis, no me
gusta abusar…
-
Pero si no llevas ni
seis semanas en el gimnasio – le increpa Jorge.
-
Lo suficiente para
darle una buena manita de hostias – dice Juan
-
¿Pero tú te has visto
la cara? – le dice Javier – si estás hecho un cristo!
-
Eso fue en el pogo del
concierto que me pilló a traición el muy hijoputa – se defiende Juan
-
¡Venga ya! – dice
Marta, ¡ni que fuera yo un trofeo! ¡Fue patético! Iban los dos moñas perdidos y
no hacían más que insultarse y empujarse, hasta que en una de esas se cayeron
los dos al suelo y por eso tienen la cara así los dos, por idiotas.
Otra vez carcajadas.
-
¿Y qué me decís del
conciertazo de los Glam, Two, Three, Four? – dice Mónica.
Fundido a negro.
Dos vagones más
adelante están los componentes al completo de Los Fiambres.
-
Venía a lo que venía,
ni camiseta ni hostias. Me la zumbé como Dios manda – dice Nando refiriéndose a
su encuentro con Miriam
-
¡Anda ya! Mentiroso –
le corrige Nes – si estaba yo fumándome un canuto al lado del camerino y la
chica salió a los cinco minutos con la camiseta. Eres un fantasma.
-
Y a ti qué, ¿te ha
arañado la cara tu novia? – refiriéndose a Nes
-
Pues tendrías que ver
la cara del otro – contesta todo chulo, Nes.
-
¿Pero qué coño os
pasa? – pregunta Naím – Que el mismísimo Johnny “el Seco” nos ha fichado para
su compañía y además ¡vamos a sacar un disco! Y vosotros aquí hablando de
chorradas. Parecéis críos.
-
Es verdad, ¡chavales! ¡Que
por fin vamos a ganar pasta! – dice Nino todo entusiasmado.
-
(Todos a coro): Oé,
oe, oe ,oe, Oé, Oé
De repente, los
cánticos de Los Fiambres han llegado hasta los oídos de nuestros chicos y
chicas.
-
No puede ser… - dice
Javier
-
¿Y qué más da? – dice
Mónica
-
Voy para allá a saldar
una cuenta pendiente, no me esperéis despiertos – dice completamente en serio
Juan.
Y se dirige hacia el
vagón donde están Los Fiambres.
Nando que lo ve
advierte a Nes
-
Oye tronco, ¿ese no es
el menda con el que te partiste la cara? – dice Naím – Pues viene derechito a
por la revancha.
-
¡Es verdad! – dice Nes
– parece que no ha tenido suficiente, voy a ver si esta vez lo pilla a la
primera.
Y también se dirige al
encuentro de Juan.
Cuando están a punto
de alcanzarse de repente estalla una bomba en el vagón.
Fundido a negro.
“Suena un pitido agudo en mis oídos que va en aumento. Siento
calor por todo el cuerpo.
Me duele la cabeza como si alguien me estuviera dando con un
mazo. Estoy desorientado.
Esta es sin duda la peor resaca de mi vida”.
Es Javier que ha sobrevivido a la explosión pero está muy
maltrecho.
Hay cadáveres por todos lados, no ha sobrevivido ninguna de
nuestras chicas, ni del resto excepto Javier que mira con incredulidad los
cuerpos de sus amigos y amigas.
De repente se oye:
-
¡Aquí hay uno! Tiene
el pulso débil, ayudadme a sacarlo de aquí – se trata de un sanitario –
tranquilo chaval que ya te tenemos.
Aparecen dos sanitarios más con una camilla y un equipo de
monitorización. El tiempo apremia. Javier tiene destrozada la parte izquierda.
-
¡Joder daos prisa que
se nos va! – grita el primer sanitario – está perdiendo el pulso… ¡Mierda! ¡Ha
entrado en parada! ¡Traed las putas palas y dejadlo en el suelo!
Los otros sanitarios obedecen y traen las palas. El primer
sanitario les dice que se aparten y comienza a darle descargas.
-
Vamos chaval,
responde, no te me vayas – dice mientras le aplica las descargas.
Javier no responde y no deja de oírse el pitido de la muerte.
-
¡No me jodas chaval,
vamos hostia! – sigue el sanitario sin descanso
Los otros dos sanitarios afirman que ha muerto, que ya no se
puede hacer nada. Mientras el primero deja las palas e indica.
-
Hora de la muerte las
8:11 de la mañana.